lunes, enero 24, 2005

¿Gabo "pederasta"?

Gabo, con su cómplice Pablo Neruda, abusando de la estatua de una ninfa

Ayer sábado en la sección de cultura del periódico Milenio Diario apareció una nota titulada "Proponen boicot contra obra de García Márquez", firmada por Katia Zaragoza, desde Aguascalientes, donde dice que la diputada federal del PRD por ese estado (quien es además esposa del senador perredista Jesús Ortega), Angélica de la Peña Gómez, propuso dicho boicot porque, afirma, la última obra del Premio Nobel colombiano, Memoria de mis putas tristes, "promueve la pederastia".

Como ya cobran por entrar a la página de Milenio y no tenía ganas de transcribir tanta idiotez, me puse a buscar la información en otro medio de Internet y me encontré esta joya: un artículo escrito por la propia diputada en el portal Agseso.com.

Disfruten ustedes la "excelsa" prosa de la diputadeta y prepárense para vomitar a gusto.

Para empezar, la insigne representante popular tiene una grave confusión conceptual: confunde "pederastia" (sin acento, doña Angie) con "pedofilia". Para más señas, consúltese el término en la Wikipedia.

Para continuar, ningún libro, por sí solo, provoca que nadie se vuelva pederasta, pedofílico, piromaníaco o perredista. Ojalá la literatura tuviera tanto poder, pero no. Quien ya es, lo es desde antes de leer el libro.

El abuso sexual a menores es un fenómeno multicausal, que tiene que ver con la pobreza, la marginación, la desigualdad, la falta de educación, la impunidad y el contuberniio de gobiernos y empresarios, pero también con la hiperexualidad que promueven los medios de comunicación, la publicidad y la industria del espectáculo a través de artistas, cantantes y modelos adolescentes, casi niñas, con una imagen hipersexualizada que no corresponde a su edad. (Para más datos especificos sobre pederastia y abusos sexuales)

Por las barbas de Cervantes: si la dicha señora De la Peña de Ortega quiere llamar la atención podría empezar, por ejemplo, por hacer un boicot a la corrupción en su propio partido y ocuparse de cosas más importantes.

Yo lo que propongo es que todos hagamos boicot, pero al PRD, y en especial a esta diputada, por promover la estupidez. Digo, ya encarrerada, ¿por qué no propone boicotear Lolita de Nabokov, o Inmaculada, de Juan García Ponce, o, entrados en gastos, Alicia en el país de las maravillas (ya ven que a Lewis Carrol le encantaban las ninfetas)?