viernes, junio 04, 2004

La conjura de los macuarros strikes back

Que conste que yo ya había dicho que no iba a tocar el tema, pero la realidad parece empeñada en darme la razón.

Solamente tengo un comentario al respecto de esta nota: obviamente el concepto de "naco" ya está superado. Sólo los viejos y los ricos se refieren a los demás como "nacos". Siempre los demás son los nacos, nunca uno, según ellos. El concepto de "macuarro" es omniabarcador, como ya hemos detallado: no respeta sexo, edad, raza ni posición social. Todos podemos ser, en mayor o menor medida, macuarros. Como Alazraki, que a veces tiene actitudes decididamente macuarras, como apoyar a Arturo Montiel o a Roberto Madrazo, por ejemplo.

Cuauhtémoc Blanco, en el alma todos tenemos uno
por Jesús Yáñez Orozco
El Universal
Viernes 04 de junio de 2004

Carlos Alazraki analiza la imagen de Blanco: refleja al `naco` que todos llevamos dentro


Carlos Alazraki, el publicista de moda en México, suelta un cristalino suspiro cuando analiza la imagen del principal ídolo del futbol nacional: "Cuauhtémoc Blanco nos representa a los mexicanos: es el naco que todos llevamos adentro, sin distingo de clase social".

Desde la comodidad y amplitud de sus oficinas, en la colonia Anzures del Distrito Federal, Alazraki, quien soñó con ser portero profesional jugó en fuerzas básicas del Necaxa acepta el juego de hablar sobre el futbolista, últimamente más famoso por sus líos que por su futbol.

- ¿Es el reflejo cultural del mexicano?

- Va de la mano. Pero qué interesante sería tener líderes populares que ayudaran al desarrollo de México, con su ejemplo. Sería poca madre. Ni la Secretaría de Educación Pública, ni nadie, haría tanto para demostrar, con el caso de Blanco, que cuando se quiere se puede.

Blanco, abunda el publicita, "es el brillantísimo jugador, sin complejos en la cancha, que lo hace un ganador", pese a que Temo sólo ha conseguido un título de goleo en su carrera y no ha sido campeón de club.

"Cómo me gustaría que Cuauhtémoc, manteniendo su parte naca , pudiera tener una actitud más positiva, para impulsar, con el buen ejemplo, a todos aquellos que desean superarse".

Es, compara, "como Rubén Olivares, Toluco López, Julio César Chávez, aunque éste, un poquito más discreto".

- ¿Ellos son la proyección de esa naquez innata del mexicano?

- Sí, definitivamente. Pero, insisto: el México naco lo tenemos todos. pero nada más muy pocos de nosotros, 10 por ciento ó 15 por ciento de la población, tenemos el otro lado positivo, el de superarnos.

Y aclara: "Hay 15 por ciento de la población que tiene el afán de superarse. El resto, como no encuentra un rol a seguir, se queda en el Cuauhtémoc que todos llevamos dentro, yo también, lo digo sin pedos . Y con orgullo".

Y agrega con una sonrisa: "si no, no sería mexicano".

Alazraki es una especie de Rey Midas de la publicidad. Suele viajar en el Metro. Ahí, en el subsuelo de la ciudad de México, dice, ha aprendido parte de la sicología social del mexicano. Todo aquél producto o idea política que pasa por sus manos para ser vendida al público, por lo general, los convierte en éxito. Ahora es un empedernido jugador de golf.

- ¿Es cierto que no hay empresas que deseen anunciarse con Cuauhtémoc?

- Sí. De hecho nosotros tenemos, con Telmex, un contrato con la selección y vamos a hacer comerciales. Estamos pensando muy seriamente aquí, en la agencia (Alazraki y Asociados), antes de proponérselo al cliente, si conviene tener a Cuauhtémoc en la campaña. Estamos pensando si lo queremos o no. Me gustaría. Pero lo estoy meditando, por la imagen de Telmex, que es intachable.

Alazraki no resiste una odiosa comparación con Hugo Sánchez.

"Hugo no tiene complejos. Lo demostró como jugador y es orgullosamente mexicano. Si Cuauhtémoc tuviera la visión triunfadora, sin complejos, que tiene Hugo, sería una continuidad de buen ejemplo.

"Me encantaría que Cuauhtémoc, con lo talentoso que es como futbolista, pudiera haber demostrado, como lo hizo Hugo, que todos podemos salir ganando".

A diferencia de lo que sucede con Temo , con Hugo había media docena de empresas que aprovechaban su imagen de futbolista triunfador para anunciarse.