viernes, abril 09, 2004

Las obscenidades de Mel Gibson


"¿Y todavía tengo que subirme hasta allá?"

No tuve escapatoria. En cada comida o reunión, invariablemente, alguien preguntaba: “¿Ya la vieron?” Y ahí estaba yo, negando con la cabeza. Así que me armé de valor y fui el sábado. Hasta eso, no había mucha gente.

Y sí, la producción es impactante. Jim Caviezel es un impresionante Jesús. Pero…

¿Cuál es la diferencia entre ver los 11 minutos de una violación a Mónica Belluci (que, por cierto, acá la hace de María Magdalena, ¿qué curioso, no?) en Irreversible y los casi 90 minutos de la flagelación, tortura y crucifixión que nos endilga el devoto señor Gibson?

Ninguna. Ambas son obscenidades. Quizá la de Gibson es mayor.

Pero no se me malinterprete. Lo obsceno no tiene que ver necesariamente con lo sexual, como casi todo mundo cree. Lo obsceno es aquello que “sale a escena” y que no debería salir, que no debería mostrarse en público.

Es decir, son tan obscenos los videos de Bejarano, Imaz y el Niño Verde como el Big Brother VIP.

¿Cuál es el objetivo de mostrar en una película el sádico sacrificio de un hombre que, para acabarla de amolar, decía que era Hijo de Dios?

Dice el devoto señor Gibson que es para demostrar y recordar que toda la humanidad es culpable de la muerte de Cristo y que “él es el primero de la fila”?

Para empezar, aquella persona que no sepa que los seres humanos somos las bestias más detestables que hemos pisado la faz de este planeta, simple y sencillamente no sabe ni siquiera dónde tiene el trasero o es extraterrestre.

Si fuimos capaces de hacer eso (y asumo el plural porque los judíos son humanos, aunque ellos se sientan todavía hechos a mano por su Dios) con el mismísimo Mesías, el que nos venía a redimir ante Dios, su padre, para hacer una nueva alianza con él, a predicar una doctrina de amor y justicia, ¿qué podemos esperar ya de nosotros como especie?

Y para terminar: opino lo mismo que Patti Smith en "Gloria": “Jesus died for somebody's sins but not mine”.

PD: Recomiendo echar un vistazo a los interesantes artículos que aparecen en la revista Letras Libres de este mes. (Pondría el enlace, pero el mercenario "empresario cultural" Enrique Krauze cobra por la consulta, así que si se la pueden robar o leer en el Sanborns, mejor)